Miles marcharon otra vez para decir No al gasoducto
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Publicado: martes, 21 de febrero de 2012 | |
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Patricia Rivera Polanco/CLARIDAD
Desde poco antes de las 9:30 de la mañana comenzaron a llegar manifestantes al lado norte del Capitolio. Se respiraba un aire de gozo y lucha.
Eran las 10:15 am cuando comenzaron a llegar delegaciones del Comité Yabucoeño Pro-Calidad de Vida, el Colegio de Profesionales de Trabajo Social, Casa Pueblo y la Unión de Trabajadores de la Industria Eléctrica y Riego (UTIER). Vendedores efusivos promocionaban frutas, camisas que leían “Prohibido Olvidar” y gorras que decían “Lucha sí, entrega no”.
A las 11:07 am los manifestantes comenzaron a marchar dirigidos por una enorme pancarta que leía “Puerto Rico firme contra el Gasoducto.” La organización y motivación era tal, que en menos de 20 minutos la marcha logró llegar hasta la calle San Francisco donde comerciantes e incluso monjes de la Capilla Franciscana, saludaban con ánimo a los manifestantes.
Mientras la marcha se fue adentrando en la Calle del Cristo, se podía notar una ola de hermosas banderas puertorriqueñas entre un mar de pancartas contra el gasoducto. Descubrimos de repente un gigantesco tubo hecho en papel de estraza sostenido en un lado por el profesor de sociología Gazir Sued y por uno de sus alumnos en el lado contrario. Era la creativa representación del llamado “tubo de la muerte” o Gasoducto.
También estuvieron presentes también otros grupos y personalidades como el Movimiento Independentista Nacional Hostosiano(MINH), la Asociación Puertorriqueña de Profesores Universitarios de Puerto Rico (APPU), el candidato a la gobernación por el PPD Alejandro García Padilla, el senador Eduardo Bhatia, el congresista Luis Gutiérrez, miembros de la comunidad LGBT, el alcalde del municipio de Comerío José A. “Josian” Santiago, el Movimiento Unión Soberanista (MUS), jóvenes miembros de la organización para la educación ecológica Sembrando Conciencia, entre otros.
A las 11:40 am la marcha llegó a su destino: frente a La Fortaleza. Fueron recibidos por la profesora de la Universidad Interamericana en Ponce, Vivian Mattei y la actriz puertorriqueña Anamín Santiago, quienes coreaban consignas como “ese tubo es peligroso y de seguro nebuloso”. Mattei comenzó dándole la bienvenida a los grupos de activistas ambientales y a las comunidades hispanas en Nueva York en solidaridad con esta lucha, quienes ese día realizaron una actividad de protesta frente a las oficinas del Cuerpo de Ingenieros en esa ciudad. De paso, condenó la Ley “Tito Kayak” y concluyó expresando que “nuestros terrenos agrícolas merecen toda nuestra solidaridad”.
Entonces se dirigió a los presentes el Ingeniero y líder comunitario Alexis Massol. Comenzó pidiendo un fuerte aplauso para el Comité Barrio Portugués y su dirigente Carlos Cabán, presentes en la actividad. Luego se refirió a la importancia de la lucha de distintos municipios de Puerto Rico por la defensa del medio ambiente. Señaló ademas el valor ambiental que se aprendió de la lucha de Peñuelas en contra del gasoducto del sur; la fuerza y la derrota de Utuado en contra de las expropiaciones; la de Toa Baja con su sentido de la revolución; y de Cataño el legado de la perseverancia en su lucha contra la contaminación ambiental. Agradeció a los grupos presentes, en especial a los estudiantes de la Universidad de Puerto Rico, de la Universidad Interamericana, a los manifestantes que protestaron en contra del incinerador en Barceloneta y Arecibo y a Sierra Club. Concluyó señalando que “Puerto Rico no debe depender de las agencias federales para defender la salud geográfica de esta patria.”
Luego correspondió el turno al congresista Luis Gutiérrez, quien fue recibido con fuertes aplausos. Éste dijo sentirse agradecido de estar en Puerto Rico y conocer personas que defienden sus suelos hasta las últimas consecuencias. Se despidió diciendo que “en el Congreso ya le dimos F al Gasoducto” y le insufló ánimo a los manifestantes gritando “el gasoducto no va”.
También habló Ricardo Alegría hijo, quien elogió a la fundación Casa Pueblo y sus celos con el medio ambiente. La maestra Tinti Deyá, la matriarca de la familia Massol, dijo no ser mujer “de muchas palabras”, sino “de acción”, frase que enorgulleció a la multitud y provocó efusivos aplausos. Mencionó que en el proceso de fundación de Casa Pueblo, fue el querido historiador y arqueólogo Ricardo Alegría quien donó los primeros $100.00 para comenzar ese proyecto.
Finalmente, subió a la tarima el doctor Arturo Massol. “Todo comenzó en Fortaleza y en Fortaleza se acaba el Gasoducto” o “Gasoduño”, nombre que le dio varias veces durante su discurso al tubo de la muerte, refiriéndose a la insistencia del gobernador Luis Fortuño de impulsar ese devastador proyecto.
“El pueblo ha derrotado con rechazo contundente la campaña mediática de lo que cínicamente el Gobernador ha llamado Vía Verde”, añadió. También señaló que ni al Gobernador ni a sus allegados les interesa cuidar a nuestro país, pues el diseño de todos sus proyectos está hecho para dañarlo. Usó el ejemplo de la insistencia del Fortuño y el alcalde de San Juan, Jorge Santini, de remover los adoquines que adornan las calles de la vieja ciudad. Condenó la orden ejecutiva de Emergencia Energética e insistió en que “necesitamos pedir la independencia de estos combustibles fósiles”. Se despidió con evidente alegría exclamando “qué vivan nuestras aguas, nuestra gente, nuestras tierras. ¡Qué vivan ustedes! ¡Qué viva Puerto Rico!”
Desde poco antes de las 9:30 de la mañana comenzaron a llegar manifestantes al lado norte del Capitolio. Se respiraba un aire de gozo y lucha.
Eran las 10:15 am cuando comenzaron a llegar delegaciones del Comité Yabucoeño Pro-Calidad de Vida, el Colegio de Profesionales de Trabajo Social, Casa Pueblo y la Unión de Trabajadores de la Industria Eléctrica y Riego (UTIER). Vendedores efusivos promocionaban frutas, camisas que leían “Prohibido Olvidar” y gorras que decían “Lucha sí, entrega no”.
A las 11:07 am los manifestantes comenzaron a marchar dirigidos por una enorme pancarta que leía “Puerto Rico firme contra el Gasoducto.” La organización y motivación era tal, que en menos de 20 minutos la marcha logró llegar hasta la calle San Francisco donde comerciantes e incluso monjes de la Capilla Franciscana, saludaban con ánimo a los manifestantes.
Mientras la marcha se fue adentrando en la Calle del Cristo, se podía notar una ola de hermosas banderas puertorriqueñas entre un mar de pancartas contra el gasoducto. Descubrimos de repente un gigantesco tubo hecho en papel de estraza sostenido en un lado por el profesor de sociología Gazir Sued y por uno de sus alumnos en el lado contrario. Era la creativa representación del llamado “tubo de la muerte” o Gasoducto.
También estuvieron presentes también otros grupos y personalidades como el Movimiento Independentista Nacional Hostosiano(MINH), la Asociación Puertorriqueña de Profesores Universitarios de Puerto Rico (APPU), el candidato a la gobernación por el PPD Alejandro García Padilla, el senador Eduardo Bhatia, el congresista Luis Gutiérrez, miembros de la comunidad LGBT, el alcalde del municipio de Comerío José A. “Josian” Santiago, el Movimiento Unión Soberanista (MUS), jóvenes miembros de la organización para la educación ecológica Sembrando Conciencia, entre otros.
A las 11:40 am la marcha llegó a su destino: frente a La Fortaleza. Fueron recibidos por la profesora de la Universidad Interamericana en Ponce, Vivian Mattei y la actriz puertorriqueña Anamín Santiago, quienes coreaban consignas como “ese tubo es peligroso y de seguro nebuloso”. Mattei comenzó dándole la bienvenida a los grupos de activistas ambientales y a las comunidades hispanas en Nueva York en solidaridad con esta lucha, quienes ese día realizaron una actividad de protesta frente a las oficinas del Cuerpo de Ingenieros en esa ciudad. De paso, condenó la Ley “Tito Kayak” y concluyó expresando que “nuestros terrenos agrícolas merecen toda nuestra solidaridad”.Entonces se dirigió a los presentes el Ingeniero y líder comunitario Alexis Massol. Comenzó pidiendo un fuerte aplauso para el Comité Barrio Portugués y su dirigente Carlos Cabán, presentes en la actividad. Luego se refirió a la importancia de la lucha de distintos municipios de Puerto Rico por la defensa del medio ambiente. Señaló ademas el valor ambiental que se aprendió de la lucha de Peñuelas en contra del gasoducto del sur; la fuerza y la derrota de Utuado en contra de las expropiaciones; la de Toa Baja con su sentido de la revolución; y de Cataño el legado de la perseverancia en su lucha contra la contaminación ambiental. Agradeció a los grupos presentes, en especial a los estudiantes de la Universidad de Puerto Rico, de la Universidad Interamericana, a los manifestantes que protestaron en contra del incinerador en Barceloneta y Arecibo y a Sierra Club. Concluyó señalando que “Puerto Rico no debe depender de las agencias federales para defender la salud geográfica de esta patria.”
Luego correspondió el turno al congresista Luis Gutiérrez, quien fue recibido con fuertes aplausos. Éste dijo sentirse agradecido de estar en Puerto Rico y conocer personas que defienden sus suelos hasta las últimas consecuencias. Se despidió diciendo que “en el Congreso ya le dimos F al Gasoducto” y le insufló ánimo a los manifestantes gritando “el gasoducto no va”.También habló Ricardo Alegría hijo, quien elogió a la fundación Casa Pueblo y sus celos con el medio ambiente. La maestra Tinti Deyá, la matriarca de la familia Massol, dijo no ser mujer “de muchas palabras”, sino “de acción”, frase que enorgulleció a la multitud y provocó efusivos aplausos. Mencionó que en el proceso de fundación de Casa Pueblo, fue el querido historiador y arqueólogo Ricardo Alegría quien donó los primeros $100.00 para comenzar ese proyecto.
Finalmente, subió a la tarima el doctor Arturo Massol. “Todo comenzó en Fortaleza y en Fortaleza se acaba el Gasoducto” o “Gasoduño”, nombre que le dio varias veces durante su discurso al tubo de la muerte, refiriéndose a la insistencia del gobernador Luis Fortuño de impulsar ese devastador proyecto.
“El pueblo ha derrotado con rechazo contundente la campaña mediática de lo que cínicamente el Gobernador ha llamado Vía Verde”, añadió. También señaló que ni al Gobernador ni a sus allegados les interesa cuidar a nuestro país, pues el diseño de todos sus proyectos está hecho para dañarlo. Usó el ejemplo de la insistencia del Fortuño y el alcalde de San Juan, Jorge Santini, de remover los adoquines que adornan las calles de la vieja ciudad. Condenó la orden ejecutiva de Emergencia Energética e insistió en que “necesitamos pedir la independencia de estos combustibles fósiles”. Se despidió con evidente alegría exclamando “qué vivan nuestras aguas, nuestra gente, nuestras tierras. ¡Qué vivan ustedes! ¡Qué viva Puerto Rico!”
NO GAS LINES, NO NUKES, NO MILITARY, NO WARS!
ReplyDelete!NO AL GASODUCTO-DUÑO!!